¿Trabajadores del balón o rehenes del sistema? La trayectoria del futbolista en el campo delimitado por los intereses del capital

Resumen

Para comprender el fútbol, ​​es necesario conocer y reconocer la posición que ocupa la actividad a través de la distribución de los practicantes según su ubicación en el espacio social, apuntando a la necesidad de comprender el tratamiento del deporte como un fenómeno inscrito en un sistema de marketing. La popularización de los deportes –incluido el fútbol, ​​que, en la época contemporánea, abandona progresivamente su carácter recreativo para convertirse en una actividad ligada al consumo masivo– se basó (no sólo, sino sobre todo) en las relaciones capitalistas, adaptándose a la vida moderna y constituyéndose como una manera encubierta de trabajar, siguiendo las determinaciones dictadas por la producción. En el proceso de transformar el fútbol en un espectáculo deportivo globalizado, los atletas son vistos como mercancías, los fanáticos como consumidores y el juego como un activo financiero.